miércoles, 9 de noviembre de 2011

Luis Ignacio Lula Da silva

"El expresidente de Brasil contó durante su visita a Colombia detalles de la política social que hoy es ejemplo en el mundo. Le recomendó a Colombia no dejar en manos de intermediarios la administración de los recursos públicos.

A Luiz Inácio Lula da Silva no se le olvida que lo que hizo el primer día de su gestión como presidente de Brasil fue reunir a todos sus ministros, subirlos a un avión y llevarlos a los lugares más pobres del país. Quería que el presidente del Banco Central o su ministro de Hacienda “vieran a ese país que no se queja, que no hace manifestaciones, pero que está ahí, que es real y verdadero. Eso quizá haya ayudado a cambiar las cosas”.
Da Silva conocía muy bien esos sectores. Salió de una de esas zonas donde es común que los niños vayan a la cama sin comer o pasen un domingo sin almuerzo. “Conocí el pan por primera vez a los 7 años –recordó el exmandatario–. Hasta esa edad, el café que me tomaba por la mañana era con harina de yuca. Sé que es la desesperación de una madre que está delante de un fogón sin gas y sin lo más elemental para hacer una comida para sus hijos”.

Durante su visita al país, el expresidente de Brasil compartió no sólo su historia de vida, sino los resultados de su política social que sacó a 28’000.000 de brasileros de la pobreza y que redujo drásticamente los niveles de desnutrición y desescolarización de los niños y jóvenes de su país.

Brasil es una de las diez economías más importantes del mundo, pero para Lula esto de poco ayuda si no hay democracia ni políticas de distribución del crecimiento para evitar que el dinero siga en manos de pocos “y el pueblo siga pobre y desnutrido”.

“Cuando empecé mi gobierno, el 10 por ciento de la población más rica cogía la mitad del dinero del país y le dejaban a los más pobres apenas el 10 por ciento”, recordó el exmandatario quien logró cambiar estas cifras aumentando el salario mínimo en un 62 por ciento en cinco años, aún con voces en contra que le advertían que lo único que lograría era el crecimiento de la inflación.

“Y la inflación no aumentó”, dice ahora con satisfacción. Esta sola decisión sacó a millones de brasileros de la pobreza. Es más, asegura que con la crisis del 2008 Brasil salió adelante gracias a esta población. “El consumo creció siete veces más, sobre todo en los sectores populares. Los pobres comenzaron a ser tratados como ciudadanos”.

Para Luiz Inácio Lula da Silva hubo varias estrategias clave para lograr los resultados. Una fue bancarizar la población pobre: en un año 45’000.000 de brasileros tenían cuentas bancarias activas, y esto ayudó a hacer viable la segunda estrategia: no dejarles a intermediarios la administración ni la entrega de estos recursos públicos.

“No creo que deba existir la figura del intermediario, porque la mitad de la plata se queda con él. En Brasil las personas que reciben beneficios del gobierno no tienen contacto con intermediarios. Reciben una tarjeta magnética con la que puede ir al banco y sacar el dinero. Eso es sagrado”, recalcó el expresidente.

Y una tercera estrategia que garantiza el éxito es tener registros de calidad y hacer seguimiento a los programas y beneficiarios. Equipos del gobierno viajaron a lugares remotos en donde encontraron habitantes que ni siquiera tenían actas de nacimiento; eran ciudadanos que no existían. Ellos son hoy beneficiarios del programa bolsa familia, que entrega tarjetas a las mujeres del hogar para que cuenten con el dinero para la alimentación y la educación de su familia.

“Son 13 millones de tarjetas. Las personas van al banco y no les deben favores a alcaldes ni a gobernadores ni al presidente. Me decían que estaba desperdiciando el dinero, que estaba creando vagabundos que no trabajaban. Había personas que criticaban que los pobres compraran lápices o zapatos para los niños y no comida. Eso es fácil decirlo para alguien que los tiene, pero no para los que nunca lo han tenido. Quienes nunca han pasado hambre ni necesidades no saben qué son 80 dólares en manos de una madre de familia”.

Combatir el hambre fue una prioridad del gobierno de Lula da Silva, al punto de crear un ministerio dedicado exclusivamente para esta tarea. En seis años la desnutrición de Brasil se redujo un 73 por ciento y la mortalidad infantil en un 45 por ciento.

La política es ejemplo en el mundo. Esta apuesta incluye restaurantes populares, programas de lactancia materna, promoción de la agricultura familiar, distribución de alimentos a los más pobres, la entrega de microcréditos y fomento de la economía local a través de la compra al pequeño productor para abastecer los programas de alimentación del gobierno, entre otros.

“La garantía para la buena alimentación de la población debería ser la prioridad de todos los hombres públicos y de los ciudadanos de buena voluntad. No es normal –dijo– que un gobernante del mundo no ponga la lucha contra el hambre como una prioridad de sus presupuestos, así como en sus políticas”.

La generación de millones de empleos formales para padres de familia buscó reducir el trabajo infantil y por el contrario, llevar a estos niños y jóvenes a las 214 escuelas de educación básica nuevas, así como a las 14 universidades federales construidas durante su periodo. Hoy hijos de albañiles estudian carreras como medicina en estas universidades.

Estos resultados, aseguró, son una muestra de que “no hay nada más barato que invertir en los pobres” y deja atrás la teoría de que hay que esperar al desarrollo para ser inclusivos. En el caso de Brasil, la inclusión llevó al desarrollo. “Los ricos también se benefician cuando los pobres dejan de serlo”, dijo.

“Hasta le pagamos la deuda el Fondo Monetario Internacional. Después de dos años de gobierno le devolvimos 16.000 millones de dólares que le debíamos. Hoy el FMI nos debe 14.000 millones de dólares que les prestamos para ayudar a la crisis de los países ricos”.

Conferencia Jaime Garzón en Cali 1997

Jaime Garzón con su humor un poco jocoso en su conferencia trata de varios temas como la educación: que dice que la universidad es la mejor etapa de la vida, que porque no se hace nada, yo pienso que en parte esta situación no ha cambiado mucho ya que muchas personas van a la universidad publica van a perder tiempo y no hacen nada, ahora se ve que en las universidades ya se vende droga, se prostituye a las niñas, como es el caso de la universidad del valle, si bien es una de las mejores universidades de Colombia si ha bajado su rendimiento , o mas bien las personas que están estudiando en el presente en esta, ha hecho que su calidad se vea baja, se ha vuelto revolucionarios y siempre que hacen una protestan terminan dañando las cosas de la ciudad que son de todos nosotros, por esta razón pienso que ha cambiado pero para mal.

Dice que los colombianos no sabemos manejar la grandeza, yo creo que si es verdad porque cuanto mas nos alaban y estamos en la gloria, en el momento en que mas confían en nosotros y fallamos. Que no nos educan de acuerdo con las necesidades que tenemos al vivir en Colombia, como enseñarnos a vivir en paz y armonía, dice que lo primero que nos tienen que enseñar a los Colombianos es la convivencia, pienso que es verdad ya que el problema que nos aqueja en el paz es la violencia y esto no ha cambiado en 14 años porque siguen las guerras, la violencia, aunque si pienso que la educación es parte fundamental de esto porque como dice el proverbio: “educad al niño, para que no tengáis que castigar al hombre”, y la educación es lo básico, obviamente si hay que enfocarnos más en hacer de nosotros una mejor persona para mejorar este País. Es muy complejo lo que trata él, y todo lo que dice es la verdad, pero creo que estas situaciones no han cambiado porque los hombres siguen pensando igual.

Carecemos de falta de identidad, no sabemos de donde venimos ni para donde vamos.

Le rendimos pleitesía a los que tiene poder, a los que tienen más que nosotros, y esto aún sigue así.

Con respecto a los DD.HH dice que en Colombia no existe, ya que elegimos a un gobernador, concejal, etc, supuestamente para que haga lo que nosotros queremos que haga, para hacer lo que queramos con nuestro país y terminamos haciendo lo que ellos dicen, lo que ellos piensan que es lo mejor para nosotros, y como fuimos los que lo escogimos no podemos hacer nada, esto era así, sigue siendo así, y creo que seguirá siendo así en nuestro país, y el problema está en nosotros mismos, estamos acostumbrados a que todo nos lo tiene que recordar para que lo hagamos, pensamos en el bienestar de cada uno y no en el bien común , el bien para todos.

PARTICIPACIÓN CIUDADANA: Este país tiene el orden al revés ya que tenemos que rogar por algo que por derecho nos lo tiene que brindar,  como salud, educación, servicios, etc, ya que con los impuestos que pagan nuestros padres, se supone que estos impuestos es para brindarnos todo esto, pero No, en nuestro país las cosas son totalmente diferentes, pero como ya estamos acostumbrados a esto no hacemos nada, y eso que somos millones, contra unos pocos que quieren pasar por encima de todos y hacer lo que les venga en gana; son los GOBERNANTES. Por eso hay que hacer hacer parte del país por medio del voto, pero aún así con este derecho que tenemos se sigue viendo en el poder relaciones con el narcotraficante y las Farc y esto no ha cambiado pienso que sigue exactamente igual. Hay que hacer esto bien, tenemos que dar el voto, pero bien hecho.

En la constitución política, esta La acción de tutela es el mecanismo de protección de los derechos fundamentales
"Toda persona tendrá acción de tutela para reclamar ante los jueces, en todo momento y lugar, mediante un procedimiento preferente y sumario, por sí misma o por quien actúe en su nombre, la protección inmediata de sus derechos constitucionales fundamentales, cuando quiera que estos resulten vulnerados o amenazados por la acción o la omisión de cualquier autoridad pública.
"La protección consistirá en una orden para que aquel respecto de quien se solicita la tutela, actúe o se abstenga de hacer. El fallo, que será de inmediato cumplimiento, podrá impugnarse ante el juez competente y, en todo caso, éste lo remitirá a la Corte Constitucional para su eventual revisión.

"Nadie puede llevar por encima de su corazón a nadie, ni hacerle mal a su persona aunque piense y diga diferente" con esta frase que fue traducida por los indígenas al articulo 11 de la constitución política, Garzón nos quiere dar a entender que lo primordial que debemos entender es que hay que respetar, respetar el espacio de cada una de las personas, y así poco a poco vamos construyendo una Colombia minimamente mejor.

Y aunque estemos acostumbraos a que si los demás no hacen nada, nosotros no hacemos nada, por eso es que estamos como estamos, ah que como el otro tiró el papel al suelo entonces yo también lo tiro, no debemos empezar por eso por cambiar por lo mínimo para ir cambiando a lo máximo , dando ejemplo para ver si algún día podemos cambiar el país.